A la reunión, sin embargo, han sido invitados países como Rusia, China, India, Brasil, ¡México! y ¡Argentina!... Pero España se ha merecido un absoluto desprecio gracias a este tal Zapatero.
Lo que repito incesantemente: Zapatero ya ha logrado convertirnos en la octava impotencia mundial.
Desde luego, es el peor Presidente de Gobierno que nunca haya gobernado España (y en esta categoría incluyo también a los distintos secretarios, validos y primeros ministros que han dirigido nuestro país durante las dinastías de los Austrias y los Borbones). Es más, nuestro punticejudo presidente ha creado una nueva categoría entre nuestros gobernantes históricos: la del invalido (con o sin acento).
Poco importa que ahora "la diplomacia española" esté haciendo gestiones de un lado para otro, como una gallinita histérica, para que nos incluyan en la susodicha cumbre (dicho sea de paso, un nuevo peldaño hacia el Nuevo Orden Mundial que nos están preparando). Aunque consiguiese al final nuestra inclusión (cosa muy improbable) el daño ya está hecho: el ridículo universal ya ha cubierto a todos los españoles.
¡Cómo me recuerda este ridículo a ese otro que sufrimos hace años con aquel también incompetente presidente socialista llamado Felipe González!: La guerra del fletán, donde nuestro prestigio internacional quedó a la altura de un lenguado (o mejor, de un microscópico jurel).
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