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| El Rey, divirtiéndose en Abu Dhabi en un coche eléctrico. |
Mucho se está comentando estos días la noticia de que, mientras el señor Juan Carlos Borbón, Rey de España -por la gracia de Franco y de todos los timoratos votantes que aprobaron la desmembrante Constitución de 1978... al no presentarse alternativa a ésta-, no acudió al funeral del soldado español recientemente muerto en Afganistán, sí se ha permitido, por el contrario, el lujo de viajar a ignotos páramos orientales para distraerse en Abu Dhabi, contemplando un ocioso campeonato automovilístico... Al mencionado país fue invitado por el jecuelo, reyezuelo o dictadorzuelo que tienen por ahí. Uno de sus "primos", como suele decir, refiriéndose a esta patulea de totalitarios musulmanes de los que parece gustar en rodearse... Ya es la tercera vez que nuestro "Señor", que "Su Majestad" (...la "suya", que no la mía) viaja a esos desérticos parajes por mera distracción... Es decir: es capaz de recorrerse medio planeta para su deleite personal, pero no para rendir honores a un español que ha dado su vida por nuestra nación -no en la teoría, ni en la palabrería, sino en la realidad...
Los dos casos, evidentemente, no pueden compararse, pues el viaje a Afganistán sí entrañaría un considerable problema de seguridad, mientras que el periplo a Abu Dhabi no ofrece más riesgo que el de un mero desplazamiento aéreo...
En cualquier caso, es difícil dejar de comparar ambos viajes... uno virtual y otro "Real", en todos los sentidos de este término...
Sin embargo, en estos tiempos de undargarinianos yernos reales acusados de real corrupción parece que el tema no es baladí, y la cabecita de una Tercera República -civilizada y democrática- vuelve a asomar la cabecita...
Que no se asuste la timorata derechona sacando a la luz los trapos sucios de unas desquiciadas Primera y Segunda Repúblicas completamente fracasadas... Una República civilizada, al estilo de la estadounidense, francesa, alemana, italiana es completamente posible... De hecho, en estos tiempos, es la única posible...
Lo que me hace gracia de la mayor parte de los derechistas es la auténtica cobardía que manifiestan a coger el rábano por las orejas de acabar con una Monarquía que, por dos veces, fue erradicada de España (la primera, por una revolución ante los "verbeneros" tejemanejes y vergonzosos meteisacas de Isabel II... y, la segunda, por la cobardía de un rey -Alfonso XIII- que huyó ante unas elecciones que los republicanos sólo ganaron en las grandes ciudades, pero no en el conjunto de España...).
En fin... fue ese anormal dictadorzuelo que padecimos, llamado Franco, a quien -como no podía ser de otra forma- se le ocurrió endosarnos por tercera vez una Monarquía totalmente desprestigiada y despreciada por España...
Las acobardadas nuevas generaciones de los años setenta -con la cabecita gacha- decidieron aprobar una ridícula Constitución que nos dividía a los españoles en 17 microestados en la que, si queríamos tener Democracia- debíamos tragar con un Jefe de estado inelegible periódicamente... y con todos sus sucesores, per saecula saeculorum...
En fin, todo lo que vino después, ya lo sabéis -o, si no, os lo recuerdo, para los más olvidadizos o para los más ciegos porque no queréis ver...:
Un Rey que, ante los gravísimos problemas y amenazas de desintegración de nuestra nación no ha hecho absolutamente nada...
Un Rey que jamás ha intervenido efectivamente como mediador ante los abundantes conflictos institucionales que se han desarrolado en nuestro país, tales como los problemas en las interminables elecciones de jueces del Constitucional y Tribunal Supremo...
Un Rey al que le atribuyen como mérito... ¡El haber salvado su opíparo puesto de trabajo en el golpe del 23 F...! Por cierto, en relación al susodicho golpe siempre nos quedó a muchísimos la duda de por qué no dio la cara ante las televisiones por la tarde, recién producido el golpe, y no a la 1:30 de la madrugada, cuando ya se sabía que sólo una capitanía general era la que se había rebelado... ¿Si se hubieran levantado la mayoría de las capitanías... hubiera dado el mismo discurso...? ¿O hubiera imitado a su abuelo, plegado a los designios totalitarios de Primo de Rivera?
En fin, os dejo que reflexionéis si este señor -al que sumisa y puntualmente pagáis todos los años casi 1.500 millones de pesetas, 9 millones de euros, para el mantenimiento de su real casa- merece ser Rey de españa, o rey de algo...
Yo, la respuesta la tengo muy clara.
Pero me parece que vosotros, no.
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